Jon Rahm campeón del torneo final de la Race to Dubai

Jon Rahm campeón del torneo final de la Race to Dubai

Se ha disputado En el Jumerais Golf los pasados  16-19 Noviembre 2017

Nos preguntábamos ayer en el titular de la crónica por qué no iba a ganar Jon Rahm (-19) la Final de Dubai en su primer intento… Para gozo del deporte y el golf español, el Expreso de Barrika suele recoger este tipo de guantes con una naturalidad pasmosa. Después de jugar una ronda sin bogeys y de firmar un 67 se ha proclamado vencedor del DP World Tour Championship, o lo que es lo mismo, la Final del circuito europeo en Dubai, con un golpe de ventaja sobre sus inmediatos perseguidores, Shane Lowry (-18) y Kiradech Aphibarnrat (-18).

No son pocos los jugadores de golf que aseguran, en un tierno ejercicio de autoestima, que el clímax de su disfrute se da en situaciones de máxima presión, jugándosela al todo o nada. La realidad, después, demuestra que son muy pocos los que de verdad sienten así. Rahm sí es uno de ellos. Después, se gana o no, se acierta o no, pero hay quienes sufren lo insufrible con los temblores y otros a los que provoca gustirrinín. Jon sin miedo. No hay bruja, ogro o castillo encantado que lo asuste, como en el célebre cuento de los hermanos Grimm. Su segundo golpe en el hoyo 16 del Earth course dubaití, a por el trapo, lo demuestra, aunque verdaderamente no hace falta ceñirse a un golpe aquí o allá (hubo otros en el tramo decisivo: la recuperación en el 17, el segundo tiro en el 18…); es más bien una actitud, una manera de estar en el campo. Un modo de ser, único e intransferible.

Rahm, además, ha remado hoy con soltura contra un tipo muy concreto de corriente adversa que puede disparar los nervios, mucho más en su caso, auténtico torbellino de emociones. Y es que estaba poniendo el golf, los tiros, la intención, pero los birdies no terminaban de caer y Rose se marchaba, se iba; había salido a un golpe de la cabeza, pero en el hoyo 5 ya estaba a tres, y eso jugando bien de tee a green. Una mala salida en el hoyo 7, par 5, encendía todos los pilotos de emergencia. Quedaba un mundo, pero también la duda de si Rahm iba a ser capaz de verlo así, con la cabeza fría y el mono de trabajo bien calado. Un fantástico tercer disparo a green y el posterior birdie con un no menos formidable putt despejaban la incógnita. Y este es el verdadero plus que Jon maneja: es cierto que sus emociones van y vienen, pero también lo es que su coraje está por encima y, seguramente por ello, muestra una capacidad de reseteo inconmensurable, terrorífica, sólo al alcance de los elegidos.

 

La fabulosa hoja de servicios del ya Número 4 del mundo.

 

Jon Rahm ha echado la llave en Dubai a un año de ensueño. De principio a fin. De victoria a victoria. Asombroso. Extraterrestre. Y todo lo que ustedes quieran añadir… Los datos objetivos hablan por sí solos.

Para empezar, Rahm ha conseguido algo que está al alcance de muy pocos. Ha estado en forma durante todo el año. Esto pone de manifiesto una temporada muy bien planificada, un poderoso físico para aguantarla y una fortaleza mental excepcional. Ganó el segundo torneo que jugó en 2017 (Farmers Insurance Open), a caballo entre los meses de enero y febrero; ganó también en julio (Open de Irlanda), a mitad de año, y ha rematado con un tercer triunfo en noviembre (DP World Tour Championship). Siempre en forma, siempre preparado para cazar la victoria cuando la oportunidad se presente.

Con su triunfo en Dubai se coloca cuarto del mundo, el puesto más alto que ha tenido hasta ahora en su carrera. Es también el cuarto jugador que más ha sumado en 2017. Se queda a las puertas de los 400 puntos brutos de ránking mundial, por detrás del trío de norteamericanos formado por Dustin Johnson, Justin Thomas y Jordan Spieth. Es, por tanto, el mejor jugador europeo de 2017. Aún quedan algunos torneos, pero ya es bastante improbable que alguien le pueda dar caza por detrás.

Más datos que acompañan su fabulosa hoja de servicios:

– 26 torneos jugados

– 3 victorias

– 14 top ten

– 2 triunfos en las Rolex Series

– 3ª en la Race to Dubai

– 5º en la FedEx Cup

– 2 top 3 en WGC

– 3 cortes en Majors

– Más de 10 millones de dólares sólo en ganancias

– Dentro (ahora mismo) del equipo de Europa de la Ryder Cup

 

¡AUPA  JON!