Comienza Lacoste Promesas en La Cañada, en Guadiaro (Cádiz)

Mañana comienza la segunda prueba clasificatoria de Lacoste Promesas en el Club de Golf La Cañada, de Guadiaro (Cádiz),

Participan chicos de Andalucía y de muchas otras comunidades, entre los que hay handicaps muy bajos como los locales James Paul Martin con + 0,2 y Oliver Mena con 1,6, o Ángel Acha de Añoreta, que tiene 0,9. Oliver se clasificó el año pasado para la Final al quedar segundo en este mismo torneo, y terminó tercero en La Manga.

 

Entre las chicas destacan Rosa Ana Rivas, también de La Cañada con 4,7, Begoña Jáuregui con 2,7, jugadora de Añoreta Golf, y Noemí Jiménez con 4,1, que pertenece a Guadalmina. Las tres han sido finalistas de Lacoste Promesas en las dos primeras ediciones. Cristina Turégano, de Cáceres, es otra de las favoritas con 3,1.

 

La Cañada es un club ejemplar, un modelo a seguir. Se creó y se fue construyendo poco a poco, con el esfuerzo de muchos y gracias a la aportación de varias personas que desde el principio creyeron en su éxito, y actualmente es el lugar de reunión de los habitantes de Guadiaro, un municipio gaditano perteneciente a San Roque, que siempre ha vivido unido a la historia de Sotogrande y Valderrama.

 

Desde sus inicios, este club andaluz ha destacado por los magníficos resultados de la escuela de niños, auténtica cantera del golf español, de donde han salido campeones como Raúl Quirós o Álvaro Quirós, además de varios profesionales que se dedican a la enseñanza. Otro Quirós que habitualmente practica en La Cañada, Juan (empezó siendo caddy en Sotogrande y ya se había formado como profesional cuando se inauguró el club), se adjudicó hace dos semanas su primera victoria como Sénior en el Tour Europeo.

 

Javier Núñez, responsable de la Escuela Infantil: «Tenemos 150 niños recibiendo clases de golf, divididos en cuatro niveles: iniciación, iniciación avanzada, perfeccionamiento y tecnificación. Hemos organizado a los que se inician en seis grupos y vienen un día a la semana; los que ya saben un poquito se reparten en tres grupos y tienen clase dos días; quienes forman los tres grupos de perfeccionamiento asisten tres días por semana; y con los que componen el grupo de tecnificación incidimos sobre todo en la estrategia de juego y en cómo manejarse en el campo. Las edades de los niños comprenden entre los seis y los 18 años».

 

Los ganadores de esta previa Lacoste Promesas se decidirán después de 36 hoyos (dos días) Scratch, y los cuatro primeros clasificados –dos chicos y dos chicas- se asegurarán la participación en la Final en La Manga, donde van a tener la oportunidad y el privilegio de jugar y aprender con José María Olazábal, Miguel Ángel Jiménez y Nacho Garrido, el mejor  premio.

 

Gervasio Cuquejo, alumno de La Cañada y finalista de Lacoste Promesas en la pasada edición, declaraba el año pasado: «¿Cuándo iba yo a soñar poder jugar con esos «monstruos»? Nunca en mi vida lo hubiese imaginado, es lo mejor que me ha pasado desde que juego al golf».

 

Lacoste vestirá durante un año a los campeones LACOSTE PROMESAS 2006, quienes también podrán elegir el lugar que más les atraiga del mundo, y hasta allí les llevará IBERIA junto con un acompañante.

Mª Acacia López-Bachiller.